Guía, en el XX Aniversario de la Casa de la Cultura “Miguel Santiago”

Erasmo Quintana

exconcejal de Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento de Guía

“En las dos legislaturas que van de 1999 al 2007, siendo responsable de la concejalía de Cultura y Patrimonio en el Ayuntamiento de Guía, tuve el honor de poner la primera piedra del edificio de la Casa de la Cultura y, con la conclusión de las obras, también su inauguración, el 31 de julio de 2004. A continuación las palabras de rigor por tratarse de un evento que tenía que ver con mi concejalía de Cultura”

Sr. Presidente del Cabildo, Sr. Alcalde. Autoridades, Amigas y amigos:

Hay una especie o clase de determinismo que deja malparado el concepto que todos tenemos del libre albedrío; dicho de otro modo, la potestad que creemos tener de obrar con entera libertad tomando una decisión en vez de otra, sin sujeción condicionada de ningún tipo. Es decir, pensamos, y estamos seguros de ello, que somos libres para elegir en una encrucijada este camino o el otro, o ninguno quedándonos quietos, pero es lo cierto que dicho determinismo nos dice en realidad que no lo somos. Obramos espoleados por motivaciones fuertes (y cuanta más preparación intelectual y mayor el conocimiento que se tenga de la materia, más grande será su incidencia), sin que esté en nuestra mano evadirnos de la necesidad y sujeción al motivo que se nos presenta como muy poderoso.

Creemos pues que elegimos libremente en toda circunstancia, pero en realidad la elección y decisión nos viene impuesta por el determinismo o predeterminación de los actos humanos. Pues bien, bendito sea éste, el determinismo, desiderátum que, afectando por igual a los responsables de nuestro Cabildo Insular, representado en este acto por su presidente, Sr. José Manuel Soria y el alcalde Sr. Fernando Bañolas, se ha hecho posible que hoy estemos inaugurando estas magníficas instalaciones de la Casa de la Cultura de Guía. Ella es posible después de siglos en que hubo atención para casi todo, menos para este fértil campo en el que germina con fuerza poderosa la sabiduría humana. Un pueblo no progresa si no se sustenta en bases sólidas, hondas y anchas de la Cultura.

Hijos ilustres tiene este viejo solar del Noroeste, que desde hace mucho tiempo, presintiéndolo, vieron esa necesidad: el poeta prerromántico Vento y Travieso, Luján Pérez, Gordillo, Néstor Álamo, Manuel González Sosa, el compositor y cantante Braulio, y Miguel Santiago. Este último hizo posible a comienzos de los años 30 del siglo pasado que nuestro municipio fuera uno de los pocos que contaran con una Biblioteca Pública en aquella España gruesamente analfabeta. En justo reconocimiento a sus desvelos, hemos querido perpetuar su figura inaugurando con su ilustre nombre la biblioteca que se inaugura. Asimismo debemos agradecer a su hija, Dña. Elena Santiago, que haya querido hoy estar con nosotros, desplazándose desde Madrid donde reside, para compartir estos momentos en que se venera la tan querida por ella memoria de su padre. También se quiere resaltar y agradecer su extremada preocupación por dotarnos de volúmenes procedentes de la Biblioteca Nacional y la Biblioteca Real, que ya está en marcha.  

Nuestro genial imaginero José Luján Pérez, como sin duda merece, tiene su sala de exposiciones; la segunda sala, situada a la altura de la Biblioteca corresponde al Premio Canarias Pepe Dámaso, que desde su Agaete natal ha sabido proyectarse a las cimas universales del supremo arte, usando como estandarte la simbiosis de los pueblos sempiternamente unidos: Agaete-Gáldar-Guía. A este genial y cosmopolita artista, heredero del bello mensaje césarmanriqueño, le decimos a veces y en tono jocundo, no sin razón, que ya él ha dejado de pertenecerse a si mismo para pasar a pertenecernos a todos nosotros. Lo siento, Pepe, tú ya no eres dueño de ti. Nosotros, tus hermanos del noroeste, te poseemos por completo. Además, en la inauguración de esta Casa de la Cultura no podíamos dejar de reconocer los sobrados méritos contraídos en su fecunda vida de editor reconocido por el universo mundo de la Cultura, uno de los hijos más destacados de Guía: Jesús Bombín Quintana. A él va dedicada la principal sala de estudios del recinto que inauguramos. A su viuda, Elena Acosta, directora de la Casa de Colón, vaya nuestro más tierno y sincero reconocimiento de gratitud al querer estar hoy con nosotros. Él, Suso Bombín, en esa nueva dimensión eviterna suya, más allá del último fulgor de las estrellas, seguro que comparte con nosotros la inmensa alegría que nos embarga en este inolvidable momento inaugural del templo de la Cultura de Guía.

En tan solemne ocasión como la que vivimos y compartimos para la apertura oficial de estas salas de exposición permanente ¿quién mejor que  Francis Naranjo, otro hijo de Guía, que también vuela alto con su arte modernista y de permanente búsqueda de nuevos caminos (empresa nada fácil, por cierto), expresándose con plena autoridad en las mejores y principales salas de Arte de Europa y América? Hoy, día histórico para la Cultura de Guía quedará grabado con brillantes letras de molde en los anales de la rica historia de nuestra ciudad. Y quien les habla, hace encarecidos votos para que todos y cada uno de los responsables de esta Casa estemos permanentemente a la altura de tan espléndido marco de posibilidades que se nos presenta y ofrece a todos desde este momento.

Muchas gracias a cuantos la han hecho posible y a todos ustedes. Gracias.

El Concejal de Cultura y Patrimonio Histórico de Guía de Gran Canaria.  

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