Una Sentencia Injusta: Mi solidaridad con los 6 Sindicalistas de La Suiza - por Jacinto Ortega del Rosario
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Una Sentencia Injusta:
Mi solidaridad con los 6 Sindicalistas de La Suiza
Jacinto Ortega del Rosario
Sindicalista
Exconcejal de Cohesión social, Igualdad y Juventud del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria
En los últimos días, hemos sido testigos de una sentencia profundamente injusta y preocupante que condena a seis valientes sindicalistas de La Suiza. Como Jacinto Ortega del Rosario, sindicalista comprometido con la lucha por los derechos laborales y la justicia social, no puedo permanecer en silencio ante esta afrenta a la dignidad y los derechos fundamentales de los trabajadores.
La condena de estos seis sindicalistas es un claro ataque a la libertad de asociación y expresión, pilares fundamentales de cualquier sociedad democrática. Es alarmante observar cómo, en pleno siglo XXI, se sigue persiguiendo y castigando a aquellos que se atreven a alzar la voz en defensa de sus derechos y los de sus compañeros. Esta sentencia no solo afecta a los condenados y sus familias, sino que envía un mensaje intimidatorio a todos los trabajadores y sindicalistas: luchar por condiciones laborales justas puede costarles su libertad.
El juicio en contra de estos sindicalistas estuvo plagado de irregularidades y sesgos evidentes. Desde el inicio, el proceso judicial mostró una clara intención de criminalizar el movimiento sindical, ignorando las pruebas y testimonios que demostraban la inocencia de los acusados y su compromiso con la causa de los trabajadores. Es inaceptable que en un Estado de derecho se manipulen las leyes y se utilicen los tribunales para acallar la voz de quienes luchan por una causa justa.
Esta sentencia es un reflejo de la creciente criminalización de la protesta social y la defensa de los derechos laborales en nuestro país. En lugar de abordar los problemas estructurales que enfrentan los trabajadores, como la precariedad laboral, los bajos salarios y la falta de seguridad en el trabajo, se opta por reprimir y castigar a aquellos que se organizan para exigir mejores condiciones. Esta política de represión no solo es injusta, sino que es contraproducente y socava la cohesión social y la paz laboral.
Desde mi posición como sindicalista, quiero expresar mi total y absoluto apoyo a los seis sindicalistas de La Suiza. Su lucha es nuestra lucha, y no permitiremos que esta injusticia quede impune.
Hago un llamamiento a todas las organizaciones sindicales, movimientos sociales y ciudadanos comprometidos con la justicia a unirse en solidaridad con nuestros compañeros condenados. Debemos alzar nuestras voces más alto que nunca y exigir la revocación de esta sentencia injusta.
No podemos permitir que el miedo y la represión silencien la lucha por un trabajo digno y justo. Los derechos laborales se han conquistado a lo largo de la historia gracias al sacrificio y la determinación de innumerables trabajadores y sindicalistas que no se dejaron intimidar. Hoy, tenemos la responsabilidad de continuar con ese legado y defender con firmeza los derechos que tanto nos costaron conseguir.
En este momento crucial, reafirmo mi compromiso con la defensa de los derechos laborales y la justicia social. La lucha de los seis sindicalistas de La Suiza es un recordatorio de que la batalla por un mundo más justo y equitativo sigue vigente. No dejaremos de luchar hasta que se haga justicia y se reconozca la legitimidad de nuestras demandas.
Jacinto Ortega del Rosario