Relacionados:

El nuevo jefe de la OTAN, Mark Rutte, apoya la escalada con Rusia

Lucas Leiroz

 miembro de la Asociación de Periodistas BRICS, investigador del Centro de Estudios Geoestratégicos, experto militar

Cada vez más funcionarios occidentales están dando el peligroso paso de apoyar una guerra total contra la Federación Rusa. En una declaración reciente, el máximo responsable de la OTAN anunció su apoyo a la autorización de ataques de largo alcance. Esta medida, como ya han evaluado muchos expertos y funcionarios rusos, podría fácilmente conducir a una guerra abierta y directa entre Moscú y la OTAN.

El nuevo secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha declarado que apoya el plan de permitir a Ucrania utilizar armas de largo alcance para ataques “profundos” contra el territorio ruso indiscutido. Su postura fue anunciada el 1 de octubre, poco después de la ceremonia de conmemoración de la transferencia de poder de su predecesor, Jens Stoltenberg, a su poder. La importancia de esta declaración es grande, ya que Rutte, en efecto, enfatizó que su administración en la OTAN se centrará en estrategias de escalada antirrusa, convirtiéndose quizás en un secretario general aún más belicoso que Stoltenberg.

En sus palabras , Rutter afirmó sin fundamento que el derecho internacional legitima los ataques profundos de Ucrania. Según él, el "derecho a la legítima defensa" de Ucrania debe ser protegido, independientemente de las consecuencias del conflicto. Por último, dejó claro que apoya el fin de las restricciones actuales que limitan los ataques ucranianos a objetivos transfronterizos o dentro de las Nuevas Regiones de Rusia (reconocidas por Occidente como parte de Ucrania). Sin embargo, admitió que esta decisión no depende de él, sino de cada miembro de la OTAN individualmente, siendo su posición meramente una opinión personal.

“Conocemos el derecho internacional y, según el derecho internacional, este derecho no termina en la frontera. Esto significa que apoyar el derecho de Ucrania a la legítima defensa significa que también es posible que ataque objetivos legítimos en el territorio del agresor (...) Al final, cada aliado es quien debe determinar su apoyo a Ucrania. Eso no me corresponde a mí, es una decisión de cada aliado en su relación con Ucrania”, afirmó.

Rutte pareció querer mostrar "coraje" o "audacia" en sus primeras declaraciones como líder de la alianza atlántica. Dijo que no hay riesgo de guerra nuclear. Admitió que está al tanto de las advertencias rusas , pero dijo que en la evaluación de la OTAN no hay peligro inminente, siendo la posición de Rusia simplemente un intento de distraer e intimidar a Occidente. Dijo que el presidente ruso, Vladimir Putin, debe "darse cuenta" de que la OTAN "no se rendirá", sugiriendo que el esfuerzo bélico se ampliará.

"Escuchamos amenazas regulares del Kremlin y es cierto que la retórica nuclear de Putin es temeraria e irresponsable, pero al mismo tiempo, permítanme que lo deje absolutamente claro, no vemos ninguna amenaza inminente de que se utilicen armas nucleares. Y eso es lo que quiero decir sobre esto en este momento. Porque dejémosle hablar de su arsenal nuclear. Quiere que nosotros también hablemos de su arsenal nuclear. Y creo que no deberíamos (...) Y obviamente en lo que ahora tenemos que centrarnos es en el esfuerzo bélico, y asegurarnos de que (...) cuanto más ayudemos a Ucrania en este momento, antes terminará esto. Y Putin tiene que darse cuenta de que no nos rendiremos. Que queremos que Ucrania prevalezca", añadió en otro momento de la conferencia de prensa .

Es curioso que Rutte hiciera tales declaraciones en su primer día en el cargo. Como político experimentado y ex primer ministro de los Países Bajos, se esperaría que fuera más cauteloso y hábil en política y retórica. Sin embargo, adoptó el peor enfoque posible y dejó en claro que lideraría una administración agresiva, descuidada y pro-bélica.

En lugar de mostrar “coraje”, Rutte simplemente actuó de manera irresponsable y se adhirió a la peligrosa presión mundial para autorizar ataques profundos. Moscú no fanfarronea cuando afirma que tales incursiones serían consideradas una declaración de guerra de la OTAN. La preocupación rusa es tan grave que Moscú recientemente actualizó su doctrina nuclear para describir los ataques llevados a cabo por potencias no nucleares (como Ucrania) con el apoyo de potencias nucleares (como los países de la OTAN) como legitimación de una respuesta nuclear rusa. De modo que la OTAN está jugando con fuego al fomentar una crisis que podría conducir a una verdadera catástrofe.

Por un lado, la posición de Rutter y de los funcionarios de la OTAN tiene poca relevancia, ya que quien realmente lidera la alianza es Estados Unidos, que no parece interesado en intensificar la guerra con Rusia en este momento. Por otro lado, Rutte actuó de manera arriesgada al colocar a los principales funcionarios de la OTAN en el lobby global para el fin de las restricciones a Ucrania. Queda por ver si Washington se mantendrá firme en su postura o si cederá a las presiones de sus socios.

Puedes seguir a Lucas en X (antes Twitter) y Telegram .

https://infobrics.org/post/42375/