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sábado, 21 de septiembre de 2024 09:22h.

La mili patriótica de Cándido Méndez David Torres / No a la mili, de lo contrario que involucre a todos, comenta Antonio Aguado

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​Antonio Aguado, coherente veterano socialista, exmilitante del PSOE, destaca y comenta el texto de David Torres sobre lo que yo, Chema Tante, digo que es una buena prueba, otra más, de la monumental estafa que las cúpulas de los dos sindicatos hegemónicos le tienen tendida a su gente afiliada

 

No a la mili, de lo contrario que involucre a todos

comenta Antonio Aguado

 

ANTONIO AGUADO
ANTONIO AGUADO

Quienes hemos hecho la mili, como en mi caso 18 meses, reconocemos que fue un tiempo perdido. Pero recientemente, el exsecretario general de la UGT Cándido Méndez, hizo unas declaraciones exponiendo la necesidad de recuperar la mili, por que según él “en España se nos está deshilachando la identidad nacional”. Ya nos podemos imaginar en manos de quien estuvo la UGT.

Ese es básicamente su argumento y sin embargo, no se ha parado a meditar y exponer (siempre que estuviera de acuerdo que lo dudo), que precisamente, la mili existe y esta sustentada (la clase de tropa), por jovenes de familias humildes y sin apenas estudios, ni oportunidades para poder afrontar su futuro con un mínimo de garantías. En consecuencia, han encontrado en la mili su formula de subsistencia.

Eso es muy injusto, pues significa que los jovenes de familias ricas y pudientes, no tienen necesidad de hacer la mili y en caso de hacerla, es a través de la Academia General Militar del Ejercito de Tierra en Zaragoza, la Escuela Naval Militar de Marín-Pontevedrao o la Academia General del Aire de San Javier-Murcia. Por regla general, muchos padres de éstos alumnos, son o han sido igualmente militares de graduación y pasando por el mismo proceso.  

Con el argumento de defender sus fronteras, los países se dotan de ejércitos y les imprimen sus “propios sellos”, como es el caso de Suiza país que, siempre se ha caracterizado por su neutralidad ante cualquier guerra o conflicto. Sin embargo, sólo cuenta con el 5% de militares profesionales. Dos tercios de sus jovenes son considerados aptos y entre los 19 y 34 años, reciben un entrenamiento militar básico que dura entre 18 y 21 semanas. Las empresas subvencionan la formación militar de sus empleados. El resto realizan servicios alternativos.

Pero el único país que da ejemplo por no tener ejercito es Costa Rica, pues después de sufrir una guerra civil lo abolió hace 75 años. Teniendo muchos países a su alrededor con tantos conflictos, se viene destacando por su paz, tranquilidad y bienestar.  

Es evidente, lo injusto de que el Ejercito español tenga que estar sustentado por jovenes de familias humildes y mientras tanto, los “muy patriotas” como es el caso del fascista Santiago Abascal, evaden realizar ese deber "tan patriótico”.

En este sentido, fue bastante aleccionador el documental muy galardonado del cineasta norteamericano Michael Moore sobre la Guerra de Irak, y en el que demostró que, a la misma enviaron jovenes humildes, negros y latinos. En una sesión en el Capitolio y a su salida, le preguntó a los congresistas quienes tenían a sus hijos combatiendo en esa mencionada guerra y sólo uno le contestó positivamente uno. 

Significa que las guerras las padece la población civil y fundamentalmente son protagonizadas por jovenes del estrato con más pobreza y exclusión social.

Antonio Aguado Suárez       

 

La mili patriótica de Cándido Méndez

David Torres 

PÚBLICO

 

CÁNDIDO MÉNDEZ EN LA MILI
CÁNDIDO MÉNDEZ EN LA MILI

Hacía tanto tiempo que no oía hablar de Cándido Méndez que creía que aún seguía al frente de la UGT. He tenido que consultar fechas un buen rato hasta enterarme de que abandonó el cargo ocho años atrás. Quién iba a sospecharlo, si Méndez estaba tan callado que parecía que siguiera trabajando a destajo, como en los viejos tiempos junto a Toxo. Vete a saber quién lo habrá reemplazado a los mandos del sindicato, lo mismo han puesto un muñeco, un piloto automático hinchable con barba y gafas, al estilo de Aterriza como puedas. Pero resulta que no, que al frente ahora está Pepe Álvarez, que sigue con la curiosa tradición sindical española de levantar la voz poco, molestar menos y hacer huelga todos los días y fiestas de guardar.

Méndez es noticia esta semana por unas polémicas declaraciones sobre la financiación de Catalunya y la nostalgia del servicio militar, unas declaraciones que bien podían haber firmado Santiago Abascal, José María AznarFelipe GonzálezBertín OsborneIker Jiménez o José Manuel Soto. Bueno, quizá Abascal y Aznar se habrían cortado un pelo en lo de volver al servicio militar obligatorio, teniendo en cuenta que el primero está haciendo la mili en cuentagotas por Instagram y el segundo la hizo en una foto en Las Azores. Méndez, en cambio, sí cumplió con su deber patriótico a comienzos de los setenta: probablemente fue allí donde descubrió las estrategias sindicales que luego iba a poner en práctica en la UGT. En la mili -lo digo por experiencia- uno aprende básicamente a escaquearse, a aburrirse y a no dar ni chapa. Por lo visto, en las COE, Cándido Méndez también aprendió a dejarse barba y a esquiar.

La principal razón para recobrar la mili, según Méndez, es que en España se nos está deshilachando la identidad nacional. Un gallego, un murciano, un andaluz o un catalán no saben que son españoles diga lo que diga el DNI -una reliquia del franquismo puesta en marcha, primero, para identificar a presos y gentes de mal vivir, y luego, a todos los demás-, pero en cuanto se vistan el uniforme y empiecen a pegar tripazos y a menear el mocho van a descubrir las muchas cosas que tienen en común. Yo mismo, por ejemplo, la misma noche de mi llegada al cuartel del Gobierno Militar de Burgos, me encontré rodeado de veteranos vascos a punto de licenciarse. Según formamos en el patio antes de ir a dormir, los bisagras empezaron a vocear en euskera una canción que le cambió la cara al chaval que tenía a mi lado: un recién llegado como yo, sólo que de Bilbao. "Joder" me susurró, "es el Eusko Gudariak". Estaban lo bastante borrachos como para que uno de ellos se pusiera a mear en posición de firmes y sin dejar de cantar. Identidad nacional a tope, como se ve.

Nos va faltando un libro que refleje la experiencia de la mili tal y como era en realidad, porque el que escribió Muñoz Molina -Ardor guerrero- se queda bastante corto y habla más bien de sus visitas a la biblioteca, un lugar donde yo también buscaba refugio siempre que era posible. Estoy esperando que mi amigo José María Mijangos se lance a la tarea y ponga por escrito las miserias, holgazanerías, abusos y novatadas sufridas mientras te roban un año entero de vida: espero reírme tanto como con cualquiera de sus novelas. Al menos, Cándido Méndez no ha caído también en la payasada de decir que hace falta recuperar el servicio militar obligatorio para que así los jóvenes se hagan hombres de verdad. Entre su legado nihilista al frente de la UGT, sus visitas al palco del Real Madrid y su reciente entrevista en el canal TRECE, cualquier día va a presentar un anuncio de langostinos.

* Gracias a David Torres y PÚBLICO y a la colaboración de Antonio Aguado

https://blogs.publico.es/davidtorres/2024/09/20/la-mili-patriotica-de-candido-mendez/#md=modulo-portada-fila-de-modulos:4x15-t2;mm=mobile-medium

DAVID TORRES
DAVID TORRES
PÚBLICO Aparecido originalmente en PÚBLICO. La casa de mi tía republica por el alto interés del contenido, bajo los principios de Uso Justo de la UE
 Aparecido originalmente en PÚBLICO. La casa de mi tía republica por el alto interés del contenido, bajo los principios de Uso Justo de la UE
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