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Crítica a la Decisión del SUP de Contratar a "Desokupa" para Cursos de Defensa Personal

Jacinto Ortega del Rosario

exconcejal de Cohesión Social, Igualdad y Juventud del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

La reciente decisión del Sindicato Unificado de Policía (SUP) de contratar a la empresa "Desokupa" para impartir cursos de defensa personal a sus miembros es profundamente preocupante y revela una falta de criterio alarmante en la elección de colaboradores para la formación de nuestras fuerzas de seguridad.

"Desokupa" es una empresa con un historial y una retórica que la alinean peligrosamente con posturas de extrema derecha. Su discurso sobre la inseguridad en España no solo es apocalíptico y exagerado, sino que también está impregnado de odio. 

Este grupo se ha destacado por su agresividad y sus amenazas constantes hacia aquellos que critican sus métodos, incluyendo periodistas y asociaciones que no comparten su visión extremista, como Vox, Manos Limpias, Abogados Cristianos y ciertos sectores de la oligarquía.

La decisión del SUP es inquietante por varias razones:

1. Legitimación de la Violencia y la Intolerancia.

   Al asociarse con "Desokupa", el SUP no solo valida sino que también legitima un enfoque agresivo y violento hacia la resolución de conflictos. Esta asociación podría inducir a los agentes de policía a adoptar tácticas que no solo son inadecuadas, sino también contrarias a los principios democráticos y de derechos humanos que deben guiar la labor policial.

2. Pérdida de Credibilidad y Confianza Pública.

   La policía debe ser una institución imparcial y confiable. Sin embargo, al aliarse con una organización conocida por su retórica extremista, el SUP socava la confianza pública en la policía y la percepción de su imparcialidad. Esto puede tener consecuencias devastadoras para la cooperación comunitaria y la efectividad de la policía.

3. Amenazas a la Libertad de Expresión.

   "Desokupa" ha demostrado una intolerancia alarmante hacia la crítica, amenazando a periodistas y organizaciones que no comparten su visión. Al asociarse con ellos, el SUP envía un mensaje claro de que está dispuesto a alinearse con aquellos que buscan silenciar el debate y la disidencia, lo cual es incompatible con los valores democráticos que deben defender las fuerzas del orden.

4. Propagación de un Discurso de Odio.

   La retórica de "Desokupa" contribuye a un clima de polarización y odio que no tiene cabida en una sociedad democrática. La formación de los agentes de policía debe centrarse en la promoción de la tolerancia, la comprensión y el respeto por los derechos humanos, no en la adopción de posturas radicales que exacerban la división social.

En resumen, la decisión del SUP de contratar a "Desokupa" para la formación de defensa personal es una grave irresponsabilidad que pone en riesgo la integridad y la reputación de la policía española. Es fundamental que los sindicatos policiales reconsideren sus asociaciones y se comprometan a formar a sus miembros de una manera que refuerce los valores democráticos y los derechos humanos, en lugar de socavarlos. La seguridad y el bienestar de la sociedad dependen de ello.